
El romero, esa planta mediterránea que todos conocemos. La vemos en nuestros campos, calles y balcones. Una gran aliada en la cocina, pero... ¿Sabes que podemos beneficiarnos de sus propiedades en prácticamente todo nuestro cuerpo?
Antes de empezar a ver los diferentes usos que podemos darle, es importante conocer sus propiedades, para así entender el porqué de esos usos y usarla de una forma más intuitiva.
En este artículo...
- El Romero frente a la espalda y piernas cargadas
- El Romero en desodorantes
- Receta: Cómo hacer Crema de Masaje Corporal con Romero
Al romero se le atribuyen un gran número de propiedades, y aunque algunas de ellas son también para uso interno, nosotros vamos a ver solo su uso cosmético.
- Antiinflamatorio, por lo que nos ayudará a relajar la musculatura y la piel.
- Antioxidante, manteniendo la piel joven y flexible.
- Bactericida, lo que liberará de malos olores algunas zonas del cuerpo propensas a la acumulación de bacterias.
- Fungicida, siendo un gran aliado para combatir los hongos.
- Antiséptico, lo que nos ayudará a reducir la posibilidad de tener cualquier tipo de infección en la piel.
- Cicatrizante.
- Astringente, que nos mantendrá controlada la producción sebácea.
- Expectorante, que aliviará la congestión en resfriados.
Con todas estas propiedades, seguro que se te empiezan a pasar por la cabeza recetitas para empezar a potinguear. No me extraña... ¡es un ingrediente muy polivalente!
Uno de los primeros usos que se me ocurre es en el cabello, ya sea como tónico, champú, o en una mascarilla natural.
El romero nos mantendrá el cuero cabelludo libre de infecciones, regulará la producción de sebo y aportará brillo y flexibilidad a la hebra.
En este caso se podría usar en cualquiera de sus presentaciones, ya sea su hoja pulverizada, su aceite esencial, su hidrolato o algún aceite que esté macerado en él.
¿Tienes la espalda o las piernas cargadas?
Nada como un buen masaje con alcohol o aceite de romero (según tu tipo de piel).
La piel absorberá las propiedades antiinflamatorias del romero y junto al masaje, relajará la musculatura. Te recomiendo tener en casa siempre un recipiente con alcohol o aceite de romero, es muy sencillo de realizar.
Simplemente tendrás que llenar un bote limpio y desinfectado con ramas de romero, límpialas bien y déjalas colgadas unos días al sol para que sequen y pierdan su humedad, de lo contrario podrían proliferar rápidamente bacterias, sobre todo en la preparación con aceite. Llena el recipiente con el alcohol o aceite, agita bien y déjalo reposar un mínimo de 15 días en un lugar oscuro. Lo tendrás listo para usar.
Personalmente me gusta más el aceite, no reseca la piel y ayuda a la hora de realizar el masaje, además...el aceite lo puedes usar también para masajear el cuero cabelludo antes del lavado.
¿Haces tus propios desodorantes?
Depende de si los haces en formato crema o sólidos; puedes añadirles Hidrolato o Aceite de Romero. También puedes añadirle su aceite esencial para potenciar aún más su efecto bactericida (pues las bacterias de las axilas son las encargadas de general el mal olor y no el sudor como muchas personas piensan).
Estos son solo algunos ejemplos, pero puedes añadirlo a cualquier tipo de preparación que se te ocurra.
Una vez sabes sus propiedades y formas de encontrarlo, simplemente es incluir en tu preparación la forma que más se ajuste al producto que estás creando.
Ya sea en formato hidrolato para un colutorio, en formato aceite para una crema, un aceite esencial para cualquier producto o en polvo para añadir a tus preparaciones sólidas, potenciará los beneficios de ese producto para mantener tu piel sana.
Ahora que ya hemos visto un poco la parte teórica, vamos a hacer una receta muy sencilla.
Hoy vamos a hacer una crema de masaje, que puede ser empleada en espalda, piernas o pies.
Cómo hacer Crema de Masaje Corporal con Hidrolato de Romero
Ingredientes para hacer Crema de Masaje Corporal
Fase Acuosa
- 66 g de Hidrolato de Romero
Fase Oleosa
- 6 g de Cera Lanette N autoemulsionante
- 7 g de Aceite de Borago Virgen Bio
- 6 g de Manteca de Karité pura, cruda y Bio
- 10 g de Aceite de Hipérico BIO
- 2g de Cristales de Alcanfor
Aditivos
- 1 g de Vitamina E Tocoferol conservante
- 1 g de Aceite Esencial de Romero Alcanfor
- 1 g de Sharomix 705 conservante
Regulación de pH
- Papel indicador de pH
- Ácido Láctico 80%
Para bajar el ph
- Bicarbonato sódico
Para subir el ph
En cualquier elaboración debemos medir el pH para que sea correcto, por lo que recomendamos adquirir estos productos si no los tienes ya en casa
Utensilios y Envases
Elaboración paso a paso para hacer Crema de Masaje Corporal
- El primer paso en cualquier tipo de preparación es limpiar y desinfectar todas las herramientas que vayamos a utilizar, ya sean espátulas, varillas, recipientes de calor o el envase final.
- En un recipiente resistente al calor, añadimos los ingredientes de la fase acuosa.
- En otro recipiente de las mismas características, añadimos la fase oleosa.
- Llevamos ambos recipientes a baño maría a fuego lento, hasta que la fase oleosa esté completamente fundida.
- Removemos la fase oleosa y le añadimos poco a poco la fase acuosa mientras continuamos removiendo.
- Retiramos del fuego y removemos enérgicamente la preparación, pudiendo ayudarnos de unas pequeñas varillas manuales.
- Una vez ha bajado ligeramente la temperatura de la preparación, le añadimos los aditivos, comprobamos el ph, ajustando hasta llegar a pH5.
- Envasamos y ¡lista!
Sencilla, ¿verdad? Úsala para masajear aquellas zonas en las que tengas molestias y verás como alivia.
Hacer cosmética natural y casera tiene muchas ventajas: obtener un producto adaptado a ti y a las necesidades de tu piel y cabello, eliminar tóxicos de cosméticos tradicionales e ingredientes innecesarios, conocer cada ingrediente de la fórmula, reducir plásticos y, además, disfrutar de un buen rato potingueando.
Sin embargo, es importante seguir ciertos pasos para que el proceso de elaboración sea seguro y no te cause reacción alérgica o irrite tu piel:
- Desinfecta los utensilios, envase y mesa de trabajo antes de empezar. ¡Se tarda sólo 1 minuto!
- Utiliza guantes, mascarilla y gafas en aquellas elaboraciones que lo requieran.
- Haz una medición de pH de la elaboración final para asegurarte de que está en el rango correcto. Puedes corregirla fácilmente. Sube el pH utilizando un álcali como el bicarbonato. Bájalo con una solución ácida. Por ejemplo unas gotas de ácido láctico o ácido cítrico.
- Hay que probar la elaboración siempre en una zona reducida de la piel para comprobar que no hay ninguna reacción adversa.
- Utiliza los ingredientes en su dosis correcta. La indicamos en todas las páginas de producto. Si tienes dudas sobre alguno, pregúntanos! ♥ No nos hacemos responsables del mal uso de los productos y de la incorrecta dosificación de los mismos en las elaboraciones.
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