Hoy, desde Jabonarium, queremos hablarte sobre el Aceite de Caléndula y sus maravillosas propiedades. Como sabrás, nos apasiona la cosmética natural y no queríamos perder la ocasión de contarte el gran potencial que puede tener este producto en tu rutina de belleza. ¡No te lo pierdas!
En el siguiente enlace puedes adquirir nuestro Aceite de Caléndula.
El poder de la caléndula hecho aceite
La caléndula (Calendula officinalis) hace referencia a un tipo de planta que pertenece a la familia de las asteráceas y que destaca por dar una flor de color naranja muy hermosa. Pero más allá de su belleza física, lo realmente asombroso es su enorme poder para mejorar nuestra salud y apariencia física. Prueba de ello es que ya en el Antiguo Egipto era considerada como una maravilla.
Los componentes bioquímicos que se encuentran en la caléndula son los responsables de su eficacia terapéutica, por lo que se trata de un ingrediente muy popular en la cosmética y medicina tradicional. Posee propiedades antisépticas, digestivas, antivirales, antiinflamatorias y de cicatrización. ¡Casi nada!
Como imaginarás, no es de extrañar se condensaran todas las magníficas propiedades de la caléndula en un aceite. Después de todo, los aceites son la base de la cosmética más antigua. Pero ¿cómo se obtiene? Bueno, cuando hablamos de aceite de caléndula nos referimos al oleato o, lo que es lo mismo, al extracto oleoso que se produce de la maceración de las flores de la planta en cuestión en aceite. Quizás te interese saber que el tipo de aceite que más se utiliza para este tipo de procesos es el de almendras, aunque también se pueden usar otros, como el de soja, por ejemplo.
El resultado que se obtiene es un líquido de color amarillo oscuro y con una textura viscosa. En cuanto al olor... debemos reconocer que no es el mejor del mundo, pero vale completamente la pena.
De esta forma tan rudimentaria, pero efectiva, se logran extraer todos los principios activos medicinales que contiene esta planta. Y, posteriormente, este aceite puede aprovecharse para la elaboración de diferentes productos cosméticos o de higiene.
Beneficios y propiedades del aceite de caléndula
El aceite de caléndula está considerado como uno de los mejores remedios naturales para el cuidado de la piel. De hecho, se suele usar para prevenir y tratar las afecciones leves de este órgano.
Interesante, ¿verdad? Pero veamos más en detalle todo lo que puede hacer por nosotros.
En primer lugar, cabe destacar que el aceite de caléndula es un producto 100 % puro y natural. Por lo tanto, es una estupenda opción para ti si quieres adentrarte en el mundo de la cosmética natural.
- Desinflama la piel. La caléndula se caracteriza por poseer componentes de terpenos y flavonoides que producen efectos antiinflamatorios. Por lo tanto, es ideal para tratar quemaduras y roces.
- Sirve para mejorar la textura. Es rica en betacaroteno, fitoesteroles y ácido salicílico, los cuales hacen un gran trabajo protegiendo, hidratando, calmando y suavizando la piel. En este sentido, también resulta un producto idóneo para tratar y evitar las rozaduras del pañal en los bebés.
- Hace un gran trabajo en los casos de acné, eczema, úlceras varicosas e incluso en quemaduras. Y es que debes saber que se trata de un producto que favorece la producción de colágeno y glucoproteínas, lo cual hace que se estimule la regeneración dérmica.
- Aporta elasticidad. Siguiendo con el punto anterior, cabe destacar que el aumento en el colágeno producido por el aceite de caléndula tiene como efecto directo un aumento de la elasticidad y jugosidad de la piel. Por lo tanto, resulta un gran aliado para aquellos que tengan pieles maduras.
- Debido a sus magníficas propiedades está altamente recomendado para aquellas personas con pieles sensibles. Si eres una de ellas, con este aceite podrás aliviar la tirantez y las molestias que presenta este tipo de epidermis.
- Posee acción fotoprotectora. Como sabrás, el sol es uno de los principales causantes del envejecimiento de la piel, por lo que es imprescindible protegernos adecuadamente de los efectos dañinos que producen sus rayos UV. Este aceite, además, hace un gran trabajo combatiendo las manchas del rostro.
- La caléndula también resulta una gran aliada para la protección de las mucosas. Por eso, algunos geles íntimos lo incluyen entre sus ingredientes.
Qué productos pueden incluir este ingrediente?
En Jabonarium creemos firmemente en los atributos del aceite de caléndula. Venimos recomendándolo desde hace años: sabemos que sus prestaciones benefician.
En nuestra tienda online puedes comprarlo completamente puro, en un oleato formado con aceite de soja. Es la opción perfecta si te gusta preparar tus propias recetas cosméticas. Además, su uso directo también es indicado en muchos casos.
Por otra parte, entre los artículos de cosmética que suelen incluirlo en su composición figuran:
- Cremas corporales y faciales. Puedes prepararlas de forma casera o comprarlas ya elaboradas.
- Leches. Especialmente cuando se destinan a labores de limpieza o desmaquillaje cutáneo.
- Lociones. Para después del afeitado o la depilación, hidratantes y proedad de cualquier clase.
- Bálsamos y cacaos para labios.
- Jabones y, en menor medida, champús. También el pelo y el cuero cabelludo salen beneficiados por los efectos de este óleo.
- Geles íntimos. El cuidado de las zonas más privadas de cada persona exige el uso de sustancias excelentes. Su presencia aporta suavidad, alivio, protección y revitalización.
- También se puede aplicar directamente sobre la piel sin ningún tipo de problema.
Si estás empezando con la cosmética artesanal, ¡no dudes en incluirlo en tus preparaciones! El éxito está garantizado.
¿Ya conocías el aceite de caléndula? A nosotros nos entusiasma y es uno de esos productos sin los que no podemos vivir. Si todavía no lo has probado, es el momento de hacerlo.
Hacer cosmética natural y casera tiene muchas ventajas: obtener un producto adaptado a ti y a las necesidades de tu piel y cabello, eliminar tóxicos de cosméticos tradicionales e ingredientes innecesarios, conocer cada ingrediente de la fórmula, reducir plásticos y, además, disfrutar de un buen rato potingueando.
Sin embargo, es importante seguir ciertos pasos para que el proceso de elaboración sea seguro y no te cause reacción alérgica o irrite tu piel:
- Desinfecta los utensilios, envase y mesa de trabajo antes de empezar. ¡Se tarda sólo 1 minuto!
- Utiliza guantes, mascarilla y gafas en aquellas elaboraciones que lo requieran.
- Haz una medición de pH de la elaboración final para asegurarte de que está en el rango correcto. Puedes corregirla fácilmente. Sube el pH utilizando un álcali como el bicarbonato. Bájalo con una solución ácida. Por ejemplo unas gotas de ácido láctico o ácido cítrico.
- Hay que probar la elaboración siempre en una zona reducida de la piel para comprobar que no hay ninguna reacción adversa.
- Utiliza los ingredientes en su dosis correcta. La indicamos en todas las páginas de producto. Si tienes dudas sobre alguno, pregúntanos! ♥ No nos hacemos responsables del mal uso de los productos y de la incorrecta dosificación de los mismos en las elaboraciones.